Consejos para ser padrastros eficientes
Por
Eloise Terry
Lectura de 5 minutos
El matrimonio puede ser desafiante, pero estar casado y tener hijos o hijastros puede ser un reto aun mayor. Tener una relación con alguien que ya tiene hijos puede ser gratificante. También puede ser difícil saber cuál es su lugar, y a menudo será considerado como un extraño cuando llega a una familia mixta.
Aquí le presentamos algunas de las típicas situaciones que enfrentan las madrastras y padrastros y algunos consejos para lidiar con la co-crianza o crianza conjunta. La idea es que con estas sugerencias se sienta más confiado, satisfecho y eficiente en su rol.
Un equipo. Distintos retos.
Hasta los matrimonios más sólidos a menudo sienten que la dinámica de criar hijos e hijastros es retadora. Las parejas muchas veces se sienten solas en su respectivo rol como madrastra o padrastro. Ser padre biológico es una dinámica muy distinta a la de ser madrastra o padrastro, lo que puede generar estrés, ansiedad y hasta conflictos. Estas son algunas maneras de ajustarse y lograr el punto medio en la co-crianza:
Normalice el reto.
No es fácil ser padre, madre, madrastra o padrastro. Con tan solo saber que es una lucha común puede aliviar la presión a todos.
Normalice la intensidad.
Es normal que las madrastras o los padrastros se sientan excluidos, celosos y hasta invisibles. También es normal que se sientan culpables, inadecuados o ansiosos mientras tratan de satisfacer las distintas necesidades de mucha gente.
Construya la relación que desea.
Las parejas deberían apartar tiempo para estar a solas los dos. Hablen sobre sus sentimientos y ayúdense a entender sus respectivas posturas y retos.
Procure pasar tiempo a solas, usted junto con su pareja, sin los niños, para atender cabalmente las necesidades entre sí. No siempre es fácil reconectarse por las muchas presiones de la vida. Sin embargo, pasar tiempo sin los niños obra maravillas para la comunicación y sus relaciones.
Los padres y los hijos también necesitan pasar "tiempo a solas" juntos. Es una excelente manera de regalarse tiempo para compartir sus tradiciones. Le recuerda al hijo que algunas de las cosas que más aprecia no han cambiado. Eso es importante para que se sienta seguro en su relación.
Las madrastras y los padrastros también tienen que estar en capacidad de pasar tiempo con sus hijastros. Los intereses en común pueden forjar lazos afectivos fuertes y hasta expandir las experiencias de un niño. Por ejemplo, la madrastra o el padrastro puede compartir un interés en actividades como el ciclismo, cocinar o el arte con un hijastro, aunque la madre o padre biológico no tenga ese interés.
Consejos rápidos:
- Establezca tiempo entre padres e hijos regularmente para formar lazos afectivos fuertes.
- Busque actividades e intereses similares. Esto permite que los padrastros e hijastros forjen un vínculo único.
- Alivie la confusión sobre la lealtad ayudando al niño a darse cuenta de que no hay nada de malo en llevarse bien con sus padres y con su madrastra o padrastro. Es importante que el niño sepa que todos lo quieren.
Cuídese a sí mismo también
Como madrastra o padrastro, podría necesitar tiempo aparte de la familia. Eso está bien. Esto pudiera incluir actividades con amigos fuera de la familia para prevenir la fatiga de los padrastros. Esto también brinda la oportunidad para tener tiempo de padres e hijos.
Hay veces en que la madrastra o el padrastro tendría la necesidad de desahogar sus frustraciones un poquito. El rol de los padrastros es estresante y es normal querer liberar un poco las tensiones. Ese es el momento de hablar en confianza con un amigo o consejero. Aunque en la mayoría de los casos es preferible hablar con su pareja, desahogar las frustraciones es un mecanismo personal para lidiar con los problemas. Puede hasta que le sirva para calmarse y pensar con más claridad para comunicarse de manera más eficaz con su pareja.
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Conexión antes de corrección
Quizás los padres y padrastros tengan maneras distintas de manejar los conflictos. Los padres tienden a ser menos estrictos que los padrastros. Llegar a un acuerdo sobre lo que es o no aceptable en la co-crianza permite a los padres y padrastros trabajar con mayor eficiencia y constancia, y alivia el estrés en su relación. También hace que el niño se sienta más seguro y comprenda las expectativas.
Consejos útiles:
- Conozca mejor a sus hijastros antes de disciplinarlos inmediatamente. Deje que el padre o la madre sea quien imparta la disciplina.
- Tolere cierto comportamiento grosero, pero no permita que se pase de la raya. Cuando a los niños se les deja expresar sus desacuerdos, esto ayuda a mantener las reglas.
- Tenga cuidado de no hablar mal de la expareja. Ellos escuchan más de lo que usted cree. Esto puede confundir al niño.
Cómo crear una cultura de familia.
Puede esperar que al principio se comentan ciertos errores y fallas mientras los miembros de la familia comienzan a conocerse mejor. Comprenda que esto es normal en toda familia mixta y no quiere decir que algo ande mal.
Alivie la sensación de pérdida de los niños. Explíqueles lo que cambiará y lo que se quedará igual para que manejen sus expectativas.
Regular la cantidad de cambios ayuda. No hay prisa para conocerse. Tome el proceso con calma y disfrute lo que descubra en el camino.
Los rituales en los días festivos son otra excelente oportunidad para forjar lazos familiares fuertes. Negocien cuáles rituales continuarán. Invente otros para la nueva familia. Esto serviría para formar un sentido de "nosotros".
Consejos útiles:
- Las familias no se forman de la noche a la mañana. Tómese todo el tiempo que necesite.
- Entienda que el niño está pasando por una pérdida.
- Los días festivos son una manera divertida de formar nuevas tradiciones.
Transiciones de una casa a otra.
La transición de una casa a otra puede ser la parte más estresante de ser madrastra o padrastro. Puede generar ansiedad, lo cual a su vez causa frustración y vergüenza. Trate de manejar las expectativas. Sea constante y hable con su pareja sobre cómo facilitar las transiciones para todos.
Consejos útiles:
- Prepárese con tiempo.
- Durante la transición, vaya a un ambiente donde se sienta cómodo, sin formalidades y relajado.
- No hable, solo escuche. El silencio es buen consejero.
- Prevea que los niños estén de mal humor.
- Deje que el padre o la madre se haga cargo de la transición inicial y luego incorpórese cuando lo estime conveniente.
Es cierto que ser madrastra o padrastro causa retos únicos y difíciles, aunque no necesariamente tienen que ser negativos. Muchas veces, con una comunicación abierta, los retos unen más a las familias.
Recuerde: Tenga empatía consigo mismo. Cuídese. Busque apoyo. Ser madrastra o padrastro no es fácil, aunque puede ser muy satisfactorio para todos.